Este hotel familiar está situado en el centro de la ciudad, en un edificio del siglo XIX con vistas preciosas al parque. El establecimiento ofrece habitaciones limpias y elegantes, un salón relajante y un bar restaurante de calidad. El Hotel Het Witte Paard goza de una excelente ubicación para recorrer la ciudad a pie y visitar el centro histórico. La terraza es ideal para relajarse y disfrutar de una bebida en días soleados. El salón ofrece un ambiente más cálido e íntimo para los días más fríos. El chef elabora platos con una gran cantidad de ingredientes de la zona. La excelente comida se disfruta en un entorno agradable. Además, el ambiente acogedor del bar es ideal para disfrutar de una copa por la noche.