Como siempre decimos, a la hora de encontrar hoteles en Calpe u otras ciudades, va a ser determinante saber de antemano qué tipo de viaje nos planteamos realizar. Si se trata por ejemplo de una escapada romántica, probablemente lo mejor sea que nos alojemos en un buen hotel con vistas al mar. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la cercanía a las playas también es un factor determinante en el precio. Si te interesa algo más económico también te puedes internar por las calles del casco antiguo, donde encontrarás un entorno con sabor más tradicional. Por el contrario, si vas en plan de amigos, buscando un poquito más de jarana, te aconsejamos que te alojes por la zona de la Playa de Levante, donde además podrás encontrar varios hostales y un albergue juvenil a buen precio. Pese a todo, durante los meses de verano el ambiente está animado un poco por todas partes, también en el centro y sobre todo en las inmediaciones de las playas urbanas, como la del Arenal o La Fosa. Por último, para el plan puramente mochilero, lo que te recomendamos es que busques una pensión un poco más alejada de las playas o te dirijas directamente a un camping. Estos últimos los podrás encontrar en zonas de carácter más bien residencial, como son la Placita del Mar o el barrio de Colari.
Las ventajas de unos y otros alojamientos dependen de su cercanía o lejanía de las principales playas y calas que salpican el litoral de Calpe. Ahora bien, en cada zona encontrarás un ambiente diferente. En el centro disfrutarás sobre todo de los encantos de la ciudad antigua, con sus callecitas estrechas y su arquitectura de blancas fachadas, mientras que, en las zonas residenciales, gozarás de más tranquilidad y espacio para campar a tus anchas.
Los principales atractivos de Calpe son, sin lugar a dudas, sus playas y su gastronomía, pero también sus monumentos, diseminados un poco por toda la línea costera.